Los pasamos por arriba

Dentro del plan de buenas acciones que se está implementando dentro de la división, el pasado Sábado 6 de este mes, le dimos la posibilidad a los de la M12 de cumplir el sueño del pibe y jugar con sus papás deportivos, es decir, la gloriosa 96. Desde el punto de vista del juego fue un trámite para nuestros players que cumplieron al trotecito y sin despeinarse, pero valió la pena el esfuerzo de rebajarse por el hecho de ver las caritas de felicidad de los chicos de la 97 por la gloria de compartir un momento en una cancha de rugby con sus ídolos del club. Para ellos fue como jugar contra Los Pumas. Mención especial para el Gato que dió vuelta el equipo y gracias a esto se vieron estrellas que brillaron en nuevos puestos como es el caso de Fede Pulido y el Oso, habituales habitantes del ruck y el maul que se lucieron en sus nuevos puestos de win. Eso comprueba que los gordos no solo son los que ponen adelante al equipo haciendo el trabajo sucio sino que también pueden jugar tan bien o mejor que los bakcs que, por un problemita genético seguramente, solo pueden jugar en un solo puesto y nada más. En resumen, el rugby vive porque existen los gordos.