Finalmente llegó el día y nuestras Jirafas tuvieron su segunda y última fiesta antes de su anhelado viaje a San Rafael. Como en la anterior ocasión, debemos resaltar el buen comportamiento y la buena onda de nuestros chicos y de los invitados que concurrieron al magno evento. También debemos reconocer la ayuda de varios padres que sumaron su esfuerzo para que la fiesta fuera posible. Los resultados no fueron del todo los esperados ya que esperábamos una concurrencia más nutrida, pero es imposible soñar con un objetivo semejante cuando hubo demasiadas ausencias de nuestros propios chicos que parecen no haber tomado conciencia de la importancia del evento y de su participación en el mismo. Salvo este desagradable detalle, los que concurrieron volvieron a pasar un buen momento entre amigos. Felicitaciones a todos los presentes!
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