Paseando por Burzaco

El Sábado pasado nos tocó de visitante con los amigos de Pucará. Ya nos enfrentamos a principio de año pero en esa oportunidad los que viajaron fueron ellos. La verdad no nos molestó para nada volver por aquellos pagos ya que, como consuelo, pudimos disfrutar de una de las mejores parrillas de la URBA y encima los zanguangos jugaron en la cancha uno que estaba como para tirarse a dormir una siesta. Y ya que hablamos del estado perfecto del césped, nos viene a la mente el pensamiento de que si los muchachos no se tiran a tacklear bajo esas condiciones, tenemos que ir pensando en comprar colchones para llevarlos adonde jueguen. Urgente hay que ponerlos uno contra uno hasta que les salga (o se saquen el miedo...).
El juego en general estuvo bueno porque con Pucará salen siempre lindos partidos. Ambos equipos son parejos, entonces se hacen cotejos bien disputados y, lo más importante, jugados limpiamente.
Para tener en cuenta, como aspecto a solucionar, es la inconstancia en el rendimiento. Es común verlos arrancar dormidos para luego reaccionar favorablemente pasando a dominar el juego ampliamente y al final, volver a caer notoriamente. El Sábado hizo bastante calor y esa puede ser una explicación pero este fenómeno se viene sucediendo desde varias fechas atrás. Unos buenos sopapos no les vendrían mal. Será cuestión de llamarlo a Benito... The Sopapeitor!