Con el recuerdo fresco del fiasco del partido contra Manuel Belgrano, concurrimos con el desgano de quién va a ver más de lo mismo. Por suerte nos encontramos con la versión "ganadora" de los chicos que jugaron con otra actitud, lo que les permitió ganar más de un partido y pelear hasta lo último, aquellos en los que no tuvieron tanta suerte.
Tan por sorpresa nos tomaron que ni nos acordamos de llevar la cámara para tomar unas fotos. Pero por suerte para mi, eso me permitió disfrutar de varias jugadas muy buenas de los zanguangos que de otra forma me las hubiera perdido. La verdad, estos chicos cuando tienen las pilas puestas juegan muy lindo; da gusto verlos.
Párrafo aparte para los gordos: con todo el respeto que me merecen nuestros backs, nuestros gordos andan con el pie derecho. Les gusta la rosca y andan siempre revoleando contrarios para quedarse con la pelota. Si siguen jugando con esa actitud, los flacos se van a cansar de hacer tries, para felicidad de nuestro amado club. Soplan vientos de esperanza por Celina...
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